USN SSN 783 Minnesota (Newport News Shipbuilding)
La Marina de los Estados Unidos (United States Navy) mantiene activos numerosos programas para dotarse de diferentes tipos de buques con los que reemplazar a otros que alcanzan el final de su vida operativa o sustituir capacidades obsoletas por otras nuevas. Esa voluntad, que permite proveerse de naves tan avanzadas como lo es el submarino nuclear de ataque SSN 783 Minnesota, que está ahora completándose en lo que a su fabricación final se refiere, se sustenta en una capacidad industrial para la que son imprescindibles los recursos humanos en cuanto a técnicos y trabajadores especializados.
Se trata, por el carácter militar específico de lo que su esfuerzo continuado busca, de un recurso crítico y en esa línea trabaja desde 2024 la oficina de la MIB (Maritime Industrial Base) que busca dar respuesta a problemas de construcción naval militar.
Estados Unidos ya conoce, porque los necesita para las construcciones actuales y futuras que dotarán a la U.S. Navy, que tiene que redoblar sus esfuerzos para conservar ese personal especializado y atraer nuevos candidatos al entorno de la construcción naval militar.
En una era en la que se habla mucho de Inteligencia Artificial o de misiles hipersónicos, la capacidad de soldadores, caldereros, técnicos de cableado, instaladores de equipos, …, es aún más relevante porque sin ellos no se podrán fabricar a tiempo -y por ello al final los costes totales serán mayores de los planificados- los buques de combate que se necesitarán para dar respuesta a las planificaciones que tienen en marcha la construcción simultánea de más de una decena de tipos de buques de superficie.
La disminución de la capacidad industrial de fabricación local, que es un problema de construcción naval militar grave, es un hecho hoy y no es fácil encontrar respuestas positivas al problema. Desde la MIB se llevan años trabajando con empresas para buscar candidatos, formarlos y que pasen a ser parte de las plantillas que de forma directa o indirecta están involucradas en la fabricación naval militar. Es un esfuerzo que se debe impulsar para restaurar la voluntad de Estados Unidos de amplificar su capacidad de dominio marítimo, tal como ha expresado ya el presidente Trump en una de sus órdenes ejecutivas.
Distintas empresas, por todo Estados Unidos, aportan sus trabajadores a lo que es la construcción naval militar y al mantenimiento de buques. (MIB)
En ese sentido, y para paliar en parte el problema de construcción de buques de la U.S. Navy, ya se estima que se requerirá una cifra de unos 250.000 nuevos trabajadores formados y especializados en las operaciones fabriles navales militares durante los próximos diez años -140.000 de ellos para la fabricación y mantenimiento de la flota submarina y 110.000 para la de superficie-, un esfuerzo que requiere la cooperación de instituciones, el sector académico y el industrial. Todas ellas, trabajando coordinadas y con un mismo objetivo común, van a ser relevantes en el objetivo de contribuir a la seguridad nacional de los Estados Unidos con la construcción para la U.S. Navy de avanzados submarinos portadores de misiles balísticos o de navíos furtivos asociados a las capacidades expedicionarias.
Por esa necesidad, las actuaciones originadas desde la MIB son hoy más que nunca relevantes. Se han establecido más de 750 iniciativas relacionadas con la cadena de suministros navales, se trabaja en 11 programas asociados a la industria 4.0 y se han establecido actuaciones como la del Centro de Adiestramiento de Danville en Virginia para graduar especialistas en programas como el ATDM (Accelerated Training in Defense Manufacturing) que comprende una formación intensiva y acelerada de 600 horas durante un periodo formativo de 16 semanas.